Título: ¿Quién se ha llevado mi queso?
Después de un motón de años vuelve a caer en mis manos este libro, es lo que tiene las tiendas de libros de segunda mano.
Parábola con cuatro personajes en contra del nocivo inmovilismo. Personajes característicos: Los ratones fisgón y escurridizo y los liliputienses Hem y Haw. Donde Hem es nuestra parte inmovilista.
Personalmente no creo en libros de autoayuda, pero es una parábola breve y simpática en la que podemos ver que parte o que proporción llevamos en nosotros mismos de la actitud de estos personajes.
Pienso que la mayoría de nosotros somos Hem o Haw y que muy pocos, pero haberlos los hay, son inquietos como los ratoncillos Fisgón y Escurridizo, el texto también hace más incapié en Hem y Haw. Echo en falta una mayor descripción de estos dos ratoncillos, ya que al ser tan inquietos y reaccionar tan rápidamente al cambio de circunstancias tendrían también su parte de contrapeso en sus caracteres.
Me pregunto ¿hay que ser como uno o como el otro? Creo que lo que realmente hay que hacer es escucharse a uno mismo, algo no tan fácil hoy en día.
Frases:
Pag. 16: El laberinto de la narración representa ...el tiempo que cada uno de nosotros dedica a buscar lo que desea.
Pag. 58: ¿Qué haría si no tuviera miedo?
Pag. 61, 62, 63 y 65: ¿Le acechaban peligros ignotos? Cuando dejas atrás tus temores te sientes libre. Haw se dio cuenta que había permanecido prisionero de su propio temor. ...siguió pesando en lo que podía ganar, en lugar de detenerse a pensar en lo que perdía. Se sentía feliz por el simple hecho de no permir que el temor dictaminara sus decisiones. Le gustaba lo que estaba haciendo ahora.
Frases que me gustaron tembién en las páginas 69,71,73,76, 78, 80, 81, 89, 91,92, 99. Que no quisiera adelantar por respeto al autor.
